En apenas un año SRAM ha revolucionado su colección de frenos para MTB. La marca americana anhela conseguir en los frenos el mismo estatus que se ha ganado en transmisiones, y parece que ha redoblado esfuerzos para conseguirlo. Nos vamos a centrar en los nuevos Motive porque van a ser trascendentales en la gama, y porque además ya los tenemos instalados y probados, y sabemos cómo funcionan, pero antes vamos a aclarar todos los cambios que llegan cuando hablamos de frenos SRAM.

UNA GAMA COMPLETAMENTE RENOVADA
Olvídate de modelos como Level o Code. Eso ya es parte del pasado. Durante un año han convivido con modelos nuevos como los Maven o los DB8… pero eso era algo provisional. Con la llegada de los sólidos Maven para gravity y ebike, SRAM y todos los usuarios pudimos comprobar que había un nuevo rumbo, y que ese rumbo tenía buena pinta.
Los Maven han demostrado su poderío y solidez durante este pasado año, y SRAM ha bebido de las mismas aguas para desarrollar y finalmente lanzar los nuevos Motive, protagonistas de esta prueba, que se presentan a la vez que una nueva versión Base más accesible de los Maven, y los nuevos modelos DB6 y DB4, hermanos directos de los DB8. Más abajo te contamos las características esenciales de estos nuevos modelos y versiones.

Centrándonos en los Motive, que hemos podido probar en una edición limitada o Kit Ultimate Expert, se trata de un modelo destinado a sustituir tanto a los Level como a los Code. SRAM buscaba, “un modelo tan ligero como el Level y tan potente como el Code” y ha conseguido un nuevo freno considerablemente ligero, aunque no tanto como unos Level Ultimate (unos 35 g. más por unidad pesados con longitud de latiguillos similar), y a la vez potente, al menos al nivel de los Code. Estamos hablando de unos frenos de cuatro pistones que, en su mejor versión Ultimate, está en un peso similar, por poner una referencia, a los Shimano XTR de cuatro pistones, tal como hemos comprobado, y con unas prestaciones excelentes, como ahora veremos.

El desarrollo de estos nuevos frenos, con una estética angulosa y “proto” que nos recuerda a los Maven, y es bastante similar externamente a los DB8, está basado en una premisa que es general en la nueva gama SRAM: se abandona definitivamente el uso de líquido DOT y toda la gama usa aceite mineral desarrollado en colaboración con Maxima Racing Oils, buscando que las juntas presenten un comportamiento homogéneo, independientemente de la temperatura o la frecuencia de sangrado. La elección de aceite mineral, menos agresivo, va a reducir las necesidades de mantenimiento, de una manera drástica, en palabras de la marca.

Al contrario que los Maven, con su palanca SwingLink, en los Motive se utiliza el diseño DirectLink en el desarrollo de la maneta y émbolo, más ligero, algo menos potente, y únicamente regulación de alcance, mediante dial, y no de punto de contacto.

Además, como en toda la gama, el diseño es Stealth, con el depósito pegado al manillar, más compatible con cableado integrado, y que también “marida” perfectamente con un cableado tradicional por el cuadro, tal como hemos comprobado.

Los Motive utilizan las pastillas Large del anterior Code o los DB8, disponibles con compuesto orgánico o sinterizadas, y son compatibles con discos de diseños HS2, Centerline o los ligeros Centerline X con araña de aluminio.


SRAM ha concebido sus Motive con un amplio rango de usos. Esta polivalencia los lleva desde el XC al Trail más potente. Según utilicemos unos u otros diseños y diámetro de discos y compuesto de pastillas iremos de la mayor ligereza a la mayor potencia.

Como decíamos, nosotros hemos podido probar la versión Ultimate, con su kit de edición limitada Expert, con un color turquesa moteado por la cara visible y negro por la interior, un kit que se acompaña de dos juegos de discos Centerline X en 180 y 160 mm, conjunto de pastillas orgánicas y sinterizadas, adaptadores, un kit de sangrado, y multiherramienta y que, al igual que los Ultimate, cuentan con tornillería de titanio, palancas de carbono y rodamiento en el pivote de la maneta.
Esta llamativa versión es la que ya hemos visto en las bicis de algunos corredores de la marca en la pasada Cape Epic, como las ganadoras en mujeres Annika Langvad y Sofía Gómez.

Además, SRAM nos ofrece los Motive Silver, con palanca de aluminio y rodamiento en el pivote de la maneta, y los más económicos Motive Bronze, con palanca de aluminio y pivote con casquillo de fricción. Echa un vistazo al recuadro aparte para consultar los precios de cada versión.



¿Y CÓMO VAN?
Pues tal y como decíamos al principio, estos frenos van realmente muy bien, con una potencia, tacto y consistencia excelentes. Los hemos probado con pastillas sinterizadas y discos Centerline X de 180 mm delante y 160 mm detrás, y, tras un rodaje inicial, pronto estaban dando todo su potencial, con mucha potencia, y muy modulable, algo inherente a los diseños de cuatro pistones, y un tacto muy consistente en bajadas largas.

Nos encanta la ergonomía de la palanca, y, sobre todo, la consistencia que mencionamos. La maneta llega al punto de contacto y se mantiene ahí, haciendo más precisa la frenada, y, a pesar de su considerable potencia, permitiéndonos dosificar la retención en terrenos delicados con precisión y seguridad.

Sólo nos queda refrendar estas excelentes sensaciones con un test de larga duración, algo importante con unos frenos, y en diferentes condiciones, como una climatología calurosa. Mientras lo confirmamos, algo nos dice que SRAM puede haber dado definitivamente con la tecla.
Así queda la colección de frenos SRAM
La gama de frenos SRAM pasa a reducirse a sólo 10 modelos (además de los kits Ultimate Expert de edición limitada de los Motive y Maven). Así pues, pasamos de los hasta 27 modelos con líquido de frenos DOT que había hasta ahora a únicamente 10 con aceite mineral, y todos con cuatro pistones, renunciando a tener un modelo ultraligero y apostando por las prestaciones en toda la gama.
Centrándonos en las novedades, ya hemos hablado de las versiones de los Motive, y estos son sus precios (sin discos, excepto el kit Ultimate Expert): Motive Ultimate: 300 €. Kit Motive Ultimate Expert: 655 €. Motive Silver: 245 €. Motive Bronze: 190 €.

En los Maven, además de las versiones ya existentes Ultimate, Silver y Bronze, la nueva versión Base es más accesible y con diseño de maneta DirectLink en lugar de SwingLink, y cuesta 200 €. Además, el kit Maven Ultimate Expert cuesta 655 €.


Por último, como frenos accesibles y polivalentes, a los DB8 se añaden los DB6 (105 €) y DB4 (80 €). A diferencia de los DB8, que cuenta con diseño se manetas ambidiestras que podemos colocar a ambos lados, los DB6 y DB4 tienen maneta específica para cada lado, y además, mientras los DB8 y DB6 son compatibles con abrazadera MatchMaker X, los DB4 no lo son. El tacto y potencia es igual en los tres modelos.