Canyon Neuron AL 9.9: Test de larga duración

Para este año 2017, Canyon ha evolucionado su modelo más polivalente, la Nerve, introduciendo pequeñas mejoras en la geometría, con el objetivo de hacerla aún más todo-terreno y con un rango de uso más amplio.

Jose María Fernández

Prueba Canyon Neuron AL 9.9.
Prueba Canyon Neuron AL 9.9.

Nuestro probador de "largas distancias" "Pepe" nos cuenta su experiencia y sensaciones con la nueva Neuron AL 9.9 del fabricante aleman Canyon: Test de larga duración (2.500km):

Recuerdo la Canyon Nerve que fue probada por lectores de la revista en el número 267 (julio de 2014) y que tuve la oportunidad de probar brevemente, como una bici muy cómoda y muy adaptable a múltiples usos, desde maratón, hasta rutas de todo tipo. Aquella versión, por el tipo de montaje, era más maratoniana (Crossmax SLR, neumáticos 2.2”,…). Suficientemente rápida para iniciarte en las carreras (mejor, si eran largas por comodidad y peso), guardo buen sabor de aquel encuentro.

Al saber que tenía que realizar una prueba de larga duración con la sucesora de aquella bici, me dieron una buena alegría. Me iba a pasar muchas horas con ella y la cosa pintaba bien.

Antes de nada, paso a presentaros la máquina. La nueva Canyon Neuron presenta cuadro de aluminio, con geometría heredada-evolucionada de la Nerve. Un par de centímetros más larga que ésta (tanto tubo horizontal, como distancia entre ejes) pero, no tan larga como las maratonianas-XC puras, un centímetro más de reach, mismo stack, vainas de igual longitud, ángulo de sillín equivalente (73,8º en la nueva, por 74º de la antigua) y un ángulo de dirección casi un grado más lanzado (69,3º por 70º), hacen que sea igual de cómoda pero, más estable y capaz de afrontar zonas más complicadas.

A esto, también ayudan las suspensiones Fox de ambos trenes. Son de la gama Performance Elite, con barras de 34 milímetros en la horquilla y proporcionan recorridos de 120 y 110 milímetros, en el eje delantero y trasero, respectivamente. Este recorrido trasero es el que presenta la versión de 29” (hay versión de 27,5” que presentaría un recorrido de 120 mm.). Cuentan con tres posiciones (Open, Medium y Firm), pudiendo afinar el reglaje con el rebote y tres posibilidades adicionales de compresión si elegimos la posición Open.

Toda la transmisión es Shimano XT M8000 de 11 coronas, en versión de doble plato (36-26) y casete 11-42. Del mismo grupo, provienen los frenos, todo un prodigio de potencia y dosificación.

Las ruedas, unas excelentes DT XM1501, son duras como cabe esperar del enfoque de la bici y se complementan con unos neumáticos Continental Mountain-King/X-King de 2,4” (delante/detrás, respectivamente). En ambos ejes, el cuadro se actualiza y utiliza medidas Boost.

Un buen detalle (por si eran pocos los que presenta la bici) es la tija Rock Shox Reverb Stealth. Sin duda, un elemento a tener en cuenta si montas por terrenos abruptos.

Y acabamos las presentaciones, con un conjunto manillar-potencia de cosecha propia (aluminio) y sillín Fizik Tundra 2 y puños Ergon GA30.

A la hora de enfocar la prueba, trato de hacer el mayor número de kilómetros posibles (en los terrenos y condiciones que pueda según el momento y la climatología), tratando la bici como si fuera mía. Esto quiere decir que no la voy a cuidar, ni a maltratar en exceso. Por ejemplo, la zona en la que monto, tiene barro arcilloso. Cuando llueve bastante, se convierte en impracticable y trato de evitar el barro (montar en esas condiciones, destruye absurdamente la transmisión y pasas mucho tiempo empujando). Hago rodillo (no con la Neuron, obviamente) o monto cubiertas finas y hago carretera un día o dos (aprovecho para hacer series en cuesta, que no suma muchos kilómetros). Aun así, esto no quita que vuelva muchos días hasta arriba de barro. Solo evito los excesos, exactamente igual que haríamos todos.

Hago un mantenimiento normal, engrasando cadena a menudo y cambiándola en plazos normales. Lo dicho, más o menos, lo que hace el ciclista medio, ni excesivamente minucioso, ni despreocupado.

Dicho esto, empezamos a montar. Por el tema comentado del barro y aunque, no ha sido un invierno lluvioso, lo primero que hice fue poner unas cubiertas un poco más finas (de 2,1”) que dieran un poco más de claridad. No es que vaya justa pero, la sola imagen de ver un 2,4” lleno de barro, hace que cueste moverlo más. Un poco por pereza y otro poco porque llovía en días alternos, las aguanté más de la cuenta, no volviendo a montar las originales, hasta que llegué a los 2086 kilómetros, justo al acabar la salida más larga que he hecho con ella (234 kilómetros).

Como era de esperar, la geometría permite “todo”, salidas largas, rutas más complicadas (en las que la tija telescópica es una gran ayuda),… con una buena comodidad y sin lastrar en exceso. No es una Exceed, ni una Lux pero, pasa por sitios que podrían complicar mucho la vida a sus hermanas “carreristas”.

A nivel de uso, los “defectos” que puedo encontrar en este tiempo son todos relativos a gustos o manías personales. Por ejemplo, me gustan los frenos con un recorrido de maneta mínimo y el que presenta los XT de la Neuron se me hace un poco largo. Es una manía, nada más. Frenan de lujo, con un dedo, sin bloquear, apurando la frenada hasta el final y sin desfallecer. Tampoco me gusta el sillín que se me hace incómodo en tiradas largas (tampoco es el objetivo para el que fue diseñado).

La transmisión se ha comportado de modo excelente, como era de esperar de un grupo XT. Cambié cadena a los 1804 kilómetros, no habiendo notado merma de rendimiento, durante ese tiempo.

He aprovechado el paso por los 2500 kilómetros para hacer este primer resumen-presentación y poder acercar el seguimiento de la prueba a todos los lectores interesados en la Neuron. Del total de kilómetros, sólo 180 han sido de carretera, por lo que, no es relevante en términos generales.

La única incidencia que he tenido en estos 2500 kilómetros es la pérdida de un “guiacables” de plástico (que guía el latiguillo de la tija) que, una vez que lo saqué, no ajustaba bien (sería mejor que fueran los tradicionales metálicos roscados) y se perdió en marcha. Se solucionó con una brida y conseguí un guiado un poco mejor, puesto que, lo poco que sobresalía el latiguillo, me rozaba en el potenciómetro de la biela.

Y esto es todo hasta ahora. Seguimos haciendo kilómetros.

 

- GEOMETRÍA -

Distancia entre ejes: 1.136 mm

Long vainas: 445 mm

Tuvo sillín: 440 mm

Tubo horizontal: 599 mm

Altura de pedalier: 343 mm

Ángulo de dirección: 69,3º

Ángulo de sillín: 73,8º

- FICHA TÉCNICA -

[CUADRO] Neuron AL 110 mm. [AMORTIGUADOR] Fox Float DPS Performance Elite LV [HORQUILLA] Fox Float 34 Performance Elite 120 mm. [PEDALIER] Shimano XT 36-26 [CAMBIO] Shimano XT [DESVIADOR] Shimano XT [MANDOS DE CAMBIO] Shimano XT [CASETE] Shimano XT 11-42 [CADENA] Shimano HG701 [FRENOS] Shimano XT M8000 180/180 [DIRECCIÓN] Acros Canyon Tapered [POTENCIA] Canyon V14 [MANILLAR] Canyon H13 Flat AL 740 mm. [TIJA SILLÍN] Rock Shox Reverb Stealth B1 [SILLÍN] Fizik Tundra 2 MG [RUEDAS] DT Swiss XM1501 Spline One Boost [CUBIERTAS] Continental Mountain King II/X-King 29x2,4” [PESO] 12,90 kg. (Talla M) [TALLAS] En 29” M (probada), L y XL [PRECIO] 2999€ [ INFO] www.canyon.com.