No están todos los que son, pero sí son todos los que están. Estos son algunos puntos claves a revisar en tu bici para garantizar que puedes salir de ruta o carreras sin problemas. Nadie conoce mejor tu bici que tú mismo. Ese radio que se afloja, ese neumático que pierde presión al cabo de una semana... todas esas cosas seguro que las tienes en cuenta, pero hay más. Si no quieres disgustos y sólo centrarte en disfrutar, revisa todo no sólo los puntos que sabes que fallan de tu bici, no sólo los que te indicamos aquí, revisa todo lo que se te ocurra. Porque echar un ojo nunca está de más.
HERRAMIENTAS
Las herramientas necesarias son muy variables, pues dependerán en cada caso de nuestra propia bicicleta y de las actuaciones a realizar. Nosotros hemos utilizado:
- Destornillador
- Líquido sellante
- Lubricantes (cadena y suspensiones)
- Desmontables
- Llave de radios
- Medidor estiramiento cadena
- Llave Allen dinamométrica
- Llaves Allen variadas
- Calibre
PASO A PASO
PASO 1: Reapriete de tornillos. Que levante la mano quien no haya visto a alguien perder el sillín a mitad de ruta o carrera. Potencia, manillar, tija de sillín (fijación y abrazadera), pedales... Mejor con dinamométrica.
PASO 2: ¡Ay esa dirección! Que siempre se nos olvida y va cacharreando... Revisa la holgura para corregirla antes de que dañe los rodamientos, y ya que estás manos a la obra levántala para limpiar y engrasar.
PASO 3: El rodamiento inferior también merece atención. Eso no hay que hacerlo cada semana, pero como siempre decimos “más vale prevenir que curar”. Y esto lo puedes aplicar también al pedalier, pivotes o bujes.
PASO 4: Esto sí lo debes hacer siempre que puedas: limpiar los guardapolvos, tanto de la horquilla como el amortiguador y la tija de sillín. La arenilla que se queda ahí roza la barra y acaba por entrar desatando el caos.
PASO 5: No basta con limpiar, los retenes deben estar lubricados. La intención, más que lubricarlos (que también) es la de hidratar la goma para que no se agriete o pierda elasticidad. Utiliza un producto específico.
PASO 6: ¿Alguna vez has tocado el arpa? Nosotros tampoco, pero radios, muchos. Así detectarás al momento si hay alguno más flojo de lo normal. A veces, si la llanta es muy rígida, tenemos alguno flojo y no se aprecia.
PASO 7: “Tocar” los radios y que suene música no lo sabe hacer cualquiera. Pero al menos es mejor tensarlo a ojo comparándolo con el resto, que llevarlo muy suelto. Después lleva la rueda cuanto antes al taller.
PASO 8: ¿Nunca miras atrás? Hay que mirar, sobre todo la rueda trasera, que de pronto los tacos han desaparecido y nos quedamos sin tracción. También es el momento de valorar si el dibujo es adecuado al terreno.
PASO 9: Pobres calas. Nos acordamos de ellas cuando se nos sale el pie del pedal y nos pegamos un susto. Hay que revisarlas, porque se desgastan, sobre todo al caminar, y son un elemento de seguridad.
PASO 10: El desgaste de la cadena hay que controlarlo frecuentemente. Cada 1.500 Km aprox, toca cambio (cada 1.000 en ebike). Pero ¡jamás! la pongas nueva antes de una carrera: no se acoplará y funcionará fatal.
PASO 11: ¿Esto hace falta decirlo? La lubricación es fundamental, pero no solo de la cadena, sino de todas las partes móviles. A saber: pedales, fijaciones de pedales, pivotes del cambio o manetas de freno, rodamientos...
PASO 12: Las pastillas. Junto a las calas, son las eternas olvidadas, hasta que nos quedamos sin freno. Revisa que la altura del material frenante sea de 1 mm o más. Mirando a ojo, igual de grueso que la placa soporte.
PASO 13: Lo mismo en los discos. El grosor mínimo depende del fabricante, pero se sitúa en torno a 1,8 mm. Si cambias pastillas y discos antes de una carrera o salida, recuerda hacer previamente el rodaje adecuado.
PASO 14: A veces el líquido sellante se ha secado, pero no nos damos cuenta porque ha formado una película en el interior estanca y no pierde presión. Conviene llevar una cantidad líquida para taponar posibles fugas.
PASO 15: Si no te importa demasiado el peso, cada 2-3 meses puedes rellenar con 60ml de sellante directamente por la válvula, así no tienes que desmontar el neumático. Aunque alguna vez hay que revisar el interior.
PASO 16: En función del recorrido por donde vayas a montar o competir, puedes adaptar tanto las presiones de las suspensiones como las de las ruedas. Rebote y compresión deberás “retocarlos” en consecuencia.