ERG, sistema de frenado automático
Efectivamente, el ERG es un sistema de frenado del que gozan los rodillos con resistencia electromagnetica, esto es, la mayoría de rodillos inteligente de gama media y alta.
Estos rodillos producen la resistencia contra la que pedaleamos mediante unos imanes que se aproximan a la rueda de inercia que gira. Cuanto más cerca se ubican los imanes a la rueda, más resistencia de produce y viceversa. Por tanto, ese mecanismo es el que desencadenamos cuando manejamos la resistencia de nuestro rodillo para alcanzar los vatios a los que queremos entrenar.
Esta resistencia, sin embargo, puede generarse automáticamente mediante el sistema ERG. Este actúa según la lectura del archivo o fichero que nuestra aplicación de entrenamiento virtual esté reproduciendo en un entrenamiento. Por ejemplo, si nuestro entrenamiento está programado para pedalear durante 10’ a 250 vatios, el sistema ERG se encarga de ofrecernos esta resistencia de manera constante, independientemente de cómo estemos pedaleando. Si pedaleamos a baja cadencia (baja velocidad) y dado que la potencia es el resultado de velocidad y fuerza, el sistema nos incrementa la resistencia para que a cada golpe de pedal generemos mucha fuerza y finalmente alcancemos esos 250 w de resistencia programada. Si por el contrario decidimos pedalear con mucha velocidad (alta cadencia) el sistema ERG reducirá la resistencia, alejando a los imanes de la rueda de resistencia, para que a mucha velocidad compensemos con poca fuerza y por tanto, alcancemos igualmente los 250 w programados, sin pasarnos.
Se trata por tanto de un sistema que se adapta a nuestro pedaleo para llevarnos siempre a la resistencia que tenemos programado entrenar.

¿Es mejor o peor usar el ERG?
No es ni una cosa ni la otra. Dependerá de los gustos o necesidades de cada ciclista. El pedalear de manera “automática” sin preocuparte de cambiar desarrollos y encontrarte la resistencia exacta que toca en cada momento del entrenamiento, es algo que aprecian especialmente los ciclistas que no quieren complicaciones ni elementos extras a considerar más allá del propio pedaleo y esfuerzo físico. Hay en cambio otro grupo de usuarios o ciclistas que prefieren ser ellos los que mediante la manipulación de desarrollos y la selección del terreno, alcanzar igualmente la resistencia necesaria para producir los vatios programados u objetivo en cualquier entrenamiento objetivo. Este último grupo suelen manifestar que les gusta más pedalear sin ERG al tener sin este sistema sensaciones más reales y parecidas a las que se experimentan en la carretera o en la montaña, donde se requiere de cierta concentración para adaptar la fuerza que ejercemos en los pedales al perfil y a nuestros objetivos de entrenamiento.