Top Fuel es un nombre que prácticamente todos nosotros tenemos asociado al Cross Country y maratón y a las carreras, si bien es cierto que en su última generación (presentada en 2019) Trek sometió a este modelo a una evolución que lo enfocaba mucho al Down Country y un tipo de XC-Maratón muy agresivo y también más cómodo. Todo ello por la inminente llegada de la Supercaliber en el momento de su lanzamiento, bici que pasa a cubrir el espectro de “máquina de carreras” para los más agónicos.
La nueva versión de 2022 es por tanto la cuarta generación de las Top Fuel, una bici cuyas raíces las encontamos en los primeros años de la década de los 2000: la Trek Fuel, que marcó una época para la marca y que posteriormente sería el punto de partida de las Fuel EX de Trail y las Top Fuel de XC/maratón

Pues en esta nueva generación han apostado por potenciar aún más esos aspectos más lúdicos y algo menos competitivos de este modelo, para lo que han modificado el cuadro al completo –aunque estéticamente se asemeje mucho a su predecesor- y en él se han introducido muchos de los rasgos propios de las bicis Trek de largo recorrido de suspensiones, centrándose principalmente en un aumento de la capacidad de la suspensión trasera y en modificar la geometría.

FAST TRAIL
Ahora pasa de 115 mm a 120 de recorrido en el triángulo trasero, tan solo 5 mm más, pero que sirven como declaración de intenciones de lo que se ha buscado con la nueva Top Fuel –equivaldría en recorrido a una Fuel EX de hace unos pocos años-. No obstante, Trek no ha querido perder parte de sus raíces en el mundo de las carreras y en esta bici han pretendido mantener una buena eficacia de pedaleo, para lo que han modificado su cinemática precisamente mejorando este rasgo, tratando de lograr un buen desempeño en rutas de maratón, donde la Top Fuel aún tiene uno de sus pies. Eso sí, con unas capacidades muy elevadas de absorción en terrenos abruptos. Es un tipo de bici que en Trek, en un intento de definirla en unas pocas palabras la han llamado "Fast Trail"

El amortiguador ahora pasa a estar ubicado en posición normal, no invertido como antes, ya que en esta nueva generación han tomado la decisión de eliminar totalmente el bloqueo remoto. Esta es una de las características más controvertidas y que probablemente más den que hablar en mercados tan “Racing” como el español y los mediterráneos en general, donde solemos ser muy fanáticos de todos esos detalles inspirados en la competición.

Y sobre el amortiguador, ahora se usa uno de tres posiciones de compresión al igual que en la horquilla en las versiones montadas con Fox y de dos posiciones en los montajes equipados con RockShox. Las horquillas son de 120 mm en todos los casos, aunque se ha diseñado para poder usar una de 130 mm sin problema.

La geometría es el aspecto que más cambios ha experimentado y que más determinante van a ser a la hora de posicionar esta bici, creciendo como era de esperar en longitud del triángulo delantero. Tiene un Reach de 450 mm en talla M, unos 10 mm más largo que antes, un crecimiento que en mayor o menor medida se extiende a todas las tallas. El ángulo del tubo de dirección también se ha abierto unos grados, pasando de 67,5 a 66º mientras que el de sillín se ha verticalizado un grado, de 75 a 76º.

Incorpora el anclaje Mino Link en el pivote inferior del amortiguador para poder verticalizar un poco estos ángulos, en 0,4º y elevando el pedalier 8 mm. La longitud de vaina se ha ajustado a 435 mm.

Esta nueva versión se ofrece en nada menos que 7 tallas, desde la XS a una XXL. Lo más característico es que la talla más pequeña de todas se fabrica con ruedas de 27,5” –disponible por ahora solo en el modelo 9.7-, con el objetivo de hacer que sea más equilibrada en tamaño y prestaciones, mientras que las 6 tallas restantes están diseñadas en torno a unas ruedas de 29”. Las tallas XS y S tienen un cuadro ligeramente más curvado en el tubo superior y en la más pequeña de estas dos se podrá llevar bidón de agua, aunque un poco más reducido en tamaño que uno convencional.

A nivel de construcción del cuadro también destacan unas líneas muy parejas a las que acostumbramos a ver en otros modelos como el Fuel EX, Remedy e incluso en el Slash, con tubos muy sobredimensonados y destacando especialmente la incorporación del espacio de almacenamiento en el interior del tubo principal, de acceso a través de una boca de carba bajo el portabidón de agua.


A nivel de montaje destacan los componentes de medidas generosas, tanto en el ancho del manillar (junto a potencias muy cortas), mucha presencia de frenos de doble pistón y neumáticos de 2,4” de serie –el máximo admitido es un 2,5” según la marca-. Otro aspecto destacable es que Trek también dice adiós por ahora a los pedalieres PressFit y han apostado por un BSA de rosca (73 mm).

Se ponen a la venta dos materiales diferentes para el cuadro, totalmente de carbono o de aluminio, con un total de 9 modelos desde el Top Fuel 5 al Top Fuel 9.9, contando con opciones de montaje Shimano o SRAM en los montajes superiores. Como no, también la tendremos disponible en el Project One para su personalización.
Los precios oscilan entre los 2.499 € a los 3.999 € en los 3 modelos de aluminio, y entre 4.999 y 11.299 € del modelo tope de gama de carbono, además de disponer de la opción de cuadro suelto en ambos materiales.
TODOS LOS MODELOS Y PRECIOS

Top Fuel 5. 2.499 €

Top Fuel 7. 3.299 €

Top Fuel 8. 3.999 €

Top Fuel 9.7. 4.999 €

Top Fuel 9.8 XT. 6.499 €
Top Fuel 9.8 GX. 7.099 €
Top Fuel 9.8 GX AXS. 7.799 €

Top Fuel 9.9 XTR. 9.999 €
Top Fuel 9.9 XX1 AXS. 11.999 €
Cuadro Top Fuel aluminio: 2.299 €
Cuadro Top Fuel carbono: 3.999 €
Más información www.trekbikes.com