El León también ruge en el desierto

Luis León Sánchez gana la segunda etapa de la Skoda Titan Desert y asciende al liderato.

Ainara Hernando. Fotos: Skoda Titan Desert

Luis León Sánchez
Luis León Sánchez

A la meta de Tourza, la segunda de la Titan Desert, llega Luis León Sánchez casi derrapando tras la última curva justo antes de la línea de meta. Pero incluso así, al borde de quedarse encerrado entre los mejores bikers, que danzan en este desierto marroquí como si fuera suyo de lo bien que lo dominan y lo conocen, incluso quedándose casi encerrado y en pleno derrape los supera bajo el arco de la meta. La clase.Es el más fuerte de la carrera”, afirma sin dudar Josep Betalú, ganador de la etapa de ayer, que hoy acusó los esfuerzos y la dureza de los 1.700 metros de desnivel repartidos entre las pistas, los valles perdidos y las montañas de los 107 kilómetros que discurrían entre Boulmane Dades y Tourza. Cuatro veces ha ganado Betalú esta Titan Desert, la conoce casi mejor que a sí mismo. Sabe el catalán de lo que habla, y más habiendo sufrido en sus propias piernas el rugido del León.

Pero a Luisle, que con este triunfo ya es líder de la Titan Desert, no le preocupa en demasía el ganar o no hacerlo. “Ya tuve la suerte de hacerlo y ahora solo quiero disfrutar, en mi mente no estaba ganar ninguna etapa”. Le basta con la experiencia, “con llevarme un recuerdo bonito de esta semana en el desierto”. Con dos días disputados ya tiene uno: que un ganador de cinco Tours de Francia le haya hecho de gregario. “Tanto ayer como hoy para mi han sido dos días de estar todo el rato persiguiendo. Ellos son mucho más inteligentes y expertos en el desierto y eso se nota, tengo que aprender mucho de ellos. Yo soy un novato. Mi mentalidad era perder el menor tiempo posible”.

Llegada etapa 2 Titan Desert

En la etapa le ha pasado de todo: “Nada más salir se me ha roto la cadena y Pereiro, que es un manitas me la ha cambiado junto con otros corredores del equipo”. Son 61 participantes los que suma el Saltoki, casi todos empleados de la empresa con padrinos de lujo: Luisle, Pruden y Miguel Indurain, Óscar Pereiro y Chavanel. Corren por una buena causa, la de recaudar fondos para la lucha contra el ELA. En esta Titan Desert son como el Visma-Lease a Bike o el UAE Emirates en el Tour de Francia. Los más poderosos en todo.

Con la cadena arreglada, Luisle tiró para adelante y se encontró con Miguel Indurain. “Y ha tenido la grandeza de echarme una mano para que perdiese el menor tiempo posible, tirando de mi”. Un pentacampeón del Tour haciendo de gregario. “Me ha impactado muchísimo verle tirar de mí. Ha sido siempre un ídolo, y cuando lo conoces todavía lo es más. La sencillez que tiene y cómo habla con todo el mundo le hace más grande”. Miguelón le dijo que le hacía 20 kilómetros para que reservara fuerzas. Pero su fuerza era tal que enseguida se marchó también de la rueda de su ídolo. He contactado con la cabeza en el momento clave y querido ganar por todo este equipo de profesionales cada uno en lo suyo que están aquí, quería agradecerles el detalle que han tenido conmigo”, cuenta Luisle.

El León también ruge sobre una MTB. Las calas y pedales que utiliza siguen siendo de carretera aunque la montaña le tiene enganchado. Ya había corrido las Titan Desert de Arabia Saudi y Almería, le faltaba ésta, la más mágica. “Me siento muy cómodo aquí aunque me falta echar muchas horas en lo de la navegación. Cualquier día me perderé, me quedaré solo y me tocará mirar al cielo a ver hacia dónde van los pájaros. Pero quiero seguir disfrutando de esta experiencia. De niño viajaba mucho con mis padres en tienda de campaña y ahora durmiendo en haimas me trae muchos recuerdos a la mente. Además, me gusta pensar que no hay grandeza en el desierto, que todos somos iguales”.