Que te cueste mantener la trayectoria con la bici, especialmente cuanto más despacio vayas, puede ser por diversos factores, por una falta de equilibrio real o un incorrecto ajuste de la bicicleta. Como es difícil valorar sin estar presentes en el momento, te dejamos unas pautas que seguro que te van a ayudar, y que puedes practicar en un lugar llano y plano:
1. Desarrollo medio.
Si usas un piñón muy grande, en la primera pedalada el pie llega rápido abajo, y apenas avanzas ni ganas velocidad. Incluso te puede derrapar la rueda trasera.
2. Pedal adelantado.
Coloca el pedal de arranque en horizontal para arrancar. Así tienes 1/4 de vuelta para avanzar hasta que llega abajo.
3. Mirada al frente.
Siempre que mires al fondo es más fácil mantener el equilibrio.
4. Agarre equilibrado.
Agarra el manillar con la misma fuerza en ambas manos, y no te apoyes en él para ejercer palanca sobre el pedal.
5. Arranca.
Pisa con decisión el pedal para que la bici inicie la marcha y continúa el giro acompañando con el otro pedal.
