Si padeces de estas molestias, hay muchos factores que afectan a los antebrazos y/o muñecas, por lo que es difícil identificar cuál de ellos puede ser el factor causante. No siempre es causa de la bicicleta o algunas de sus partes, también puede ser algo fisiológico, o incluso una mala postura. Te damos algunos puntos a revisar y sus soluciones:
1. Suspensión delantera demasiado “dura”: bajar presión de aire, abrir rebote y compresión.
2. Excesiva presión de neumático delantero: reducir presión
3. Postura de conducción con mucho peso sobre el manillar:
retrasar postura, subir altura de manillar.
4. Puños muy duros o gruesos: cambiar por unos de menor diámetro.
5. Puntas del manillar demasiado elevadas: girar el manillar para hacer coincidir la elevación de las puntas con la línea de los brazos.
6. Manetas de frenos muy alejadas: regular las palancas para que frenen más cerca del manillar.
7. Manetas de frenos muy elevadas o bajas: ajustar la inclinación para situarlas en línea con los brazos.
8. Manillar muy rígido: cambiar por uno de carbono más flexible, con poco porcentaje de fibras de alto módulo.