La lista de corredores y corredoras del XCO que se preparan para los Mundial XCM y acaban haciéndolo muy bien o triunfando es larga: Mona Mitterwallner, por ejemplo, acaba de encadenar tu tercer Mundial, Simon Andreassen acaba de ganar su primer título, y ya había sido tercero en 2022, el pasado año fue Henrique Avancini el Campeón del Mundo, en 2022 lo fueron Sam Gaze y Pauline Ferrand-Prévot… las medallas este año en la prueba celebrada este fin de semana en Snowshoe (USA) son completamente de corredores XCO (Andreassen, Blevins, Valero), y en mujeres sólo Candice Lill, que realmente se está reconvirtiendo al XCO con excelentes resultados este año, se mete como especialista en XCM de entre todas las corredoras del XCO que se inscribieron en Snowshoe (Mitterwallner, Sina Frei, Jolanda Neff, Laura Sigger…).

Tenemos que remontarnos a 2021 para encontrar al último Campeón del Mundo especialista XCM, Andreas Seewald, y en mujeres, aún más, Ramona Forchini fue la última en 2020. Durante el resto de temporada, las citas importantes y Copas del Mundo las ganas los especialistas, pero llegan los Mundiales y los corredores XCO ven una oportunidad para acrecentar su palmarés, y acuden. Y ganan. Este año la participación de corredores y corredoras XCO en el Mundial celebrado en Snowhoe fue bastante relevante, seguramente porque en unos días comienza el ciclo de dos carreras norteamericanas de Copa del Mundo XCO, con el que terminará la temporada, con las carreras de Lake Placid y Mount Sainte-Anne, así que era más fácil encajar esta prueba en la agenda.

El XCO y el XCM son realmente disciplinas bastante diferentes, en una hablamos de esfuerzos de 1:30 min con mucho desafío técnico, y en la otra se acercan a las 4 o 5 horas y son más físicos que técnicos, por lo general. Un corredor que tiene como prioridad las carreras largas en toda su temporada teóricamente siempre va a poder adaptar su plan de entrenamiento a estas carreras, de un modo más centrado y específico. Debería ser ventajoso sobre otro corredor que durante la mayor parte del año tiene que cuidar su preparación hacia una mayor explosividad… pero mira, a la hora de la verdad, los del XCO también se llevan la palma en el maratón… ¿A qué se debe esto?
Por una parte, es reconocido por los preparadores físicos que es más fácil la adaptación desde la intensidad hacia la larga distancia que viceversa. Es decir, un corredor para el que durante todo el año su prioridad es el XCO tiene realmente una base de fondo físico que son los cimientos para que su cuerpo asimile la alta intensidad, y adaptar puntualmente su plan de entrenamiento para afrontar un reto de larga distancia no será difícil.

A la inversa, un corredor que habitualmente corre maratones o carreras por etapas, si un año quiere dedicarse al XCO, necesitará una planificación más larga para conseguir las adaptaciones necesarias para una prueba de rally, y por eso este camino “a la inversa” no lo vemos prácticamente nunca triunfar de manera puntual. Es decir, si estás todo el año corriendo y preparándote para maratones no es viable que a media temporada quieras correr una prueba importante de XCO y puedas hacerlo bien. El caso que comentamos de Candice Lill, especialista en larga distancia y que este año está brillando en XCO realmente es otro, la sudafricana está centrando su temporada en el XCO, y no ha sido una prueba puntual. Ha conseguido trasladar su talento que conocíamos en las carreras largas a las más cortas, pero ha sido una transición planificada en un tiempo largo, en toda una temporada.

DONDE ESTÁN LOS MEDIOS ESTÁ EL TALENTO
Pero además creemos que hay otra razón. Los corredores con talento acaban recayendo en las especialidades que tienen mayor atención mediática, donde hay mejores contratos. Por eso “hay más nivel” en el XCO que en el XCM. En el rally, un deporte olímpico, con gran repercusión, retransmisión de las carreras, etc, acaban estando los corredores con más talento, además, es posible que tener más medios también facilita en cierta medida una mejor preparación y rendimiento, aunque este no nos parece un factor tan importante.

Salvando las distancias esto es algo que también vimos en corredores del DH que, cuando llegó el Enduro, probaron la disciplina y lo hicieron con excelentes resultados, como el del propio Sam Hill (aunque otros con Martin Maes también supieron recorrer el camino inverso…) y también nos recuerda a lo que ocurre cada vez que Tom Pidcock se inscribe en una carrera MTB, o cuando lo hacía Mathieu Van der Poel… que llega “el coco” y es capaz de batir a todos los especialistas MTB. Nos puede gustar más o menos, pero esto es lo que hay, en un equipo de carretera esos corredores tienen más repercusión y mejores contratos de los que tendrían centrándose exclusivamente en el MTB. Ellos están pensando en su futuro, nada más.