La Strive es el trailer entre las bicicletas de enduro en la prueba. Con una distancia entre ejes de casi 1300 mm y un alcance (reach) de más de 500 mm en la talla L, es excepcionalmente grande. Además, cuenta con 170 mm de recorrido en la horquilla y 160 mm en la parte trasera. Las cifras suenan perfectas para saltos, rampas, bajadas pedregosas, etc. También es ideal para el bolsillo: la Strive CFR Underdog está disponible por un precio comparativamente asequible de 4999 euros y ofrece unas buenas suspensiones de Fox, ruedas DT-Swiss extremadamente sólidas y un grupo Shimano XT con frenos de cuatro pistones.
- Usando una palanca, se activa el Shapeshifter en la parte trasera. Al cambiar del modo "Shred" al modo "Pedal", se realizan ajustes en la geometría y el recorrido de la suspensión.
- El ajuste del aire en el Shapeshifter puede variar según el peso del ciclista, normalmente en un rango de 100 a 200 psi. El objetivo es que la presión sea aproximadamente igual a la utilizada en el amortiguador.
Además, cuenta con un cuadro de carbono con la fibra "CFR" de alta calidad de Canyon. La Strive también se muestra versátil. El reach se puede ajustar mediante un casquillo de dirección (495/500/505 mm). Sin embargo, lo que realmente la hace única es la tecnología "Shapeshifter" utilizada en este modelo desde hace tiempo. Se controla mediante un mando en el manillar y permite ajustar un pistón que se encuentra encima del amortiguador y, por lo tanto, modifica su cinemática. En el "Modo Pedal", el ángulo del sillín se vuelve 1,5° más vertical, el eje de pedalier se eleva en 15 mm y el recorrido trasero se reduce a 140 mm. De esta manera, a pesar de su peso relativamente alto de más de 16 kg, con la Strive se puede subir, sorprendentemente, con facilidad. En términos de eficiencia, el sistema en cuatro puntos de pivote es por lo general bueno y, con el Shapeshifter activado, es aún más neutro al pedalear.
¿Y en las bajadas? Aquí, la Strive realmente da la campanada y es una de las estrellas de la prueba. Ofrece una gran estabilidad y seguridad. La suspensión trasera responde bien, proporciona mucho apoyo y funciona de manera maravillosamente eficiente, especialmente al absorber las ondulaciones pronunciadas. Debido a su longitud que parece interminable, en terrenos estrechos es lógicamente menos maniobrable en comparación con la competencia, y es necesario poner peso conscientemente en la rueda delantera.
Lo mejor: Excelente sistema de suspensión. Excelente equipamiento. Mucha estabilidad y seguridad. Gracias a Shapeshifter, un rendimiento decente en subidas. Excelente relación calidad/precio.
A mejorar: Muy pesada. En curvas cerradas necesitas habilidad.
Ficha Técnica
Horquilla: Fox 38 Performance Elite Grip2. Amortiguador: Fox Float X2 Performance. Transmisión: 1 x 12 velocidades, 32/10-51, Shimano XT. Frenos: Shimano Deore XT M8120 con discos de 203 mm delante y detrás. Ruedas: DT Swiss 370LN/EX511. Neumáticos: Maxxis Assegai delante y Maxxis Minion DHF II Exo+ atrás, ambos con compuestos Maxx Grip y Maxx Terra 29 x 2,5” delante y 29 x 2,4” atrás. Tija de sillín: Canyon G5 170 mm. Cockpit: Canyon G5/Canyon G5.