Ajusta las suspensiones de tu bici paso a paso

Sag, rebote, precarga, compresión, puede parecer un lío tener todo “en su sitio", pero no es tan difícil. Sigue los pasos que te sugerimos y tendrás unas suspensiones a pleno rendimiento

Iván Mateos Fotos: Gonzalo Manera

Ajusta las suspensiones de tu bici paso a paso
Ajusta las suspensiones de tu bici paso a paso

1- Lo primero es calcular el sag. Para calcular correctamente el sag debemos saber previamente el recorrido real de las suspensiones (ojo, no el recorrido de la rueda), así que mediremos la barra de la horquilla y el émbolo del amortiguador. Lo ideal sería colocar el aro de goma tocando con el guardapolvos, extraer todo el aire de las suspensiones, comprimirlas hasta apreciar el tope, y volver a extenderlas completamente añadiendo unos 100 psi de presión de aire. El aro de goma nos marcará el recorrido total. Lo medimos y calculamos el 20% de sag. En el caso de Giant, tenemos 100 mm en la horquilla y 42 mm en el amortiguador, por lo que si buscamos un sag del 20% tenemos que conseguir un prehundimiento con nuestro peso encima de 20 mm en la horquilla y 8,4 mm en el amortiguador. La Merida tiene unos recorridos de 120 mm y 38 mm, por lo que lo ajustaremos a 24 mm y 7,6 mm.

paso 1
 

2- Abriremos por completo los diales de ajuste de rebote y compresión girándolos en sentido contrario a las agujas del reloj. En el caso de Fox, giraremos el mando CTD hasta la posición Descend.

paso 3
 

3- Preajustaremos las presiones a una presión media, en torno a 150 psi en el caso de los amortiguadores. Para las horquillas, es mejor mirar en los manuales técnicos que encontrarás en las webs antes indicadas. En el caso de la Fox 32 Float de la Giant necesitaremos 60 psi para nuestros 67 kilos; en la RockShox Reba RL de la Merida encontraremos una tabla con presiones recomendadas en la parte trasera de la botella izquierda. Para nuestro peso nos indica entre 90-105 psi. Es importante saber que cuando hablamos de “nuestro peso” lo hacemos refiriéndonos a el peso con equipación incluida (casco, mochila con agua, zapatillas…).

paso 4
 

4- Busca la ayuda de un compañero, o sitúate cerca de una pared. Súbete sobre la bici y comprímela contra el suelo un par de veces cogiendo impulso y presionándola simultáneamente desde el manillar y pedales.

paso 5
 

5- Manteniéndote erguido, en una posición similar a cuando afrontas un descenso, coloca el anillo de goma de la horquilla tocando con el guardapolvos. Si tu suspensión no tiene aro puedes utilizar una brida.

paso 6
 

6- Ahora siéntate sobre el sillín, sin apoyarte bruscamente, centrando tu peso.

paso 7
 

7- Al igual que has hecho con la horquilla, coloca el anillo de goma junto al guardapolvos del amortiguador.

paso 8
 

8- Con cuidado y evitando comprimir las suspensiones, bájate de la bici.

paso 9
 

9- Mide el sag de ambas suspensiones: la distancia entre el guardapolvos y el anillo de goma te indicará cuánto se ha comprimido, o sag. Si no llega al 20% tendrás que reducir presión en intervalos de 5-10 psi, según lo que necesites. Si te has pasado, añade presión. Repite el proceso hasta que logres un resultado satisfactorio. Si quieres más suavidad o comodidad de marcha puedes subir el sag hasta el 25% o 30 %; si quieres más firmeza o efectividad de pedaleo puedes reducirlo al 15% o 10%.

paso 10
 

10- Para regular el rebote no existe una tabla establecida, ya que depende de nuestro peso y de la presión de precarga (si pesamos mucho, necesitaremos más presión y el rebote será más rápido). Lo ideal es ajustar el dial rojo en un punto intermedio y a partir de ahí ir probando. Una buena comprobación es comprimir fuertemente la horquilla en parado y luego retirar las manos, para dejar que se extienda totalmente libre. Si vemos que al retroceder la rueda se levanta del suelo, es que el rebote es muy rápido y necesitaremos cerrarlo (girando el dial en sentido horario). El punto ideal se sitúa en la extensión más rápida posible sin que la rueda pierda contacto. Con el amortiguador procederemos de igual forma aunque es más difícil apreciar el efecto: tiene que recuperar rápido pero sin violencia.

paso 11
 

11- El dial de compresión es fácil de ajustar, más si es el CTD de Fox, como explicamos anteriormente. En RockShox lo ajustaremos en abierto y si vemos que la suspensión oscila con el pedaleo podremos ir cerrando clicks hasta controlar el movimiento. Hay que decir, que también se irá perdiendo sensibilidad. Girando el dial azul completamente llegamos al bloqueo.

Con todo lo aprendido y puesto en práctica, ya sólo queda salir a montar, para dar los últimos retoques para un ajuste fino o acorde con nuestras preferencias. Busca un tramo variado, con obstáculos de diferente magnitud y presta atención a cómo se comportan las suspensiones. Una buena táctica para comprender cómo afecta la regulación de rebote es hacer una tramo descenso con él completamente abierto, y después repetirlo completamente cerrado, así aprenderás mucho sobre este parámetro, pero por favor, ten mucho cuidado, ya que en ambos extremos la bici puede descontrolarse, por pérdidas de tracción de las ruedas. Con el rebote abierto las ruedas rebotan y pierden el contacto con el suelo; con el rebote cerrado, a las suspensiones no les da tiempo a recuperar entre impactos, y pierden toda su efectividad.

Verifica que en una salida normal utilizas en todo al 80-90% del recorrido mayoritariamente, agotándolo hasta el tope en saltos o escalones. Hacer algunos topes en un solo día (dependiendo del terreno) no es malo, es lo recomendado; hacer demasiados puede ser un síntoma de escasa precarga, y no hacerlos nunca de excesiva. Realiza tus propias pruebas y juega con los parámetros, y vuelve a reajustar. En el mundo de las suspensiones no hay una Ley elemental, ya que todo depende de nosotros mismos, de nuestro peso, estilo, de la geometría de la bici, del ancho del manillar, del avance del sillín…