Una carrera inigualable, batiendo todos los records, de Campeomatos del Mundo, de títulos y victorias en Copa del Mundo, Nino Schurter ha llegado al estatus de auténtica leyenda del MTB, por su carisma, innovación, capacidad de superación y, desde luego, por sus títulos.
20 años siempre en los que fue fiel a la estructura Scott SRAM, y en los que lo hemos visto competir frente a corredores de la talla de Julien Absalon o Jaroslav Kulhavy, adaptarse como nadie al nuevo XCO y seguir consiguiendo gestas como su mítica temporada 2017 en la que ganó todas las pruebas de la Copa del Mundo y el Mundial
Nino ha sido capaz de ser mítico en sus victorias y también en sus derrotas, siempre empujando y sin rendirse ni abandonar aunque se le tuerzan las cosas, como vimos en el pasado Campeonato de Europa en Melgaço hace pocos días. Allí también pudimos comprobar por qué lo quiere tanto la afición, siempre dispuesto a un selfie o un autógrafo.
El pasado año, rematado el ciclo olímpico tras los juegos de Paris, muchos daban por hecho que se iba a retirar, pero nos sorprendió anunciando que seguía un año más. Tal vez estaba pensando en su mundial de casa, Crans Montana, para una despedida perfecta frente a los suyos.
Así fue, Nino acaba de anunciar que este año lo deja, y por lo que parece ni siquiera va a completar la Copa del Mundo 2025 con las carreras de Norteamérica, para que su despededida definitiva sea delante de su afición. Este es el comunicado completo del suizo, que se mostraba emocionado, y dejando un impresionante medallero como imagen final:
“Durante las pasadas dos décadas, he dedicado mi cuerpo, mi mente y mi alma al mountain bike. Un deporte maravilloso, pero también brutal a un nivel profesional. Ganas carreras, eres un competidor y lo das todo. No puedes estar de paso. Es todo o nada. 24 horas al día y siete días a la semana.
Cuando corrí mis primeros Campeonatos del Mundo era sólo un chaval persiguiendo un sueño en Lugano 2003 y salí con mi primera medalla internacional. No pensaba que este sueño me llevaría a vivir tantos momentos inolvidables y me permitiría ganar más de la mitad de los campeonatos en los que participé a lo largo de este camino. Ha sido intenso y ahora es momento de vivir más momentos con la gente que me ha estado apoyando en todo ello.
Este año me ha dado la oportunidad de tener una despedida perfecta. Crans Montana van a ser mis últimos Campeonatos del Mundo XCO y Lenzerheide, mi carrera favorita, va a ser mi última Copa del Mundo. Dos carreras en casa, no podría ser mejor.
Quiero dar las gracias a cada uno de vosotros, compañeros de equipo, rivales, fans, y toda la comunidad del mountain bike. Habéis hecho que esto vaya a ser inolvidable. Habéis sido la razón para que empujara más fuerte, y sois la magia detrás de las medallas.
No voy a desaparecer. Seguiré montando en bici, incluso compitiendo, pero no en la Copa del Mundo, y me voy a sumergir en nuevos proyectos. Pronto os los compartiré, pero, por ahora, voy a darlo todo una última vez. ¡Nos vemos en Crans Montana! ¡Nos vemos en Lenzerheide! Hagamos leyenda. ¡Vamos!
Vuestro Nino”
