Ese dato no está muy claro aún. En principio los motores no tienen un mantenimiento periódico, es decir, se deben revisar cuando aparece un problema. De hecho, durante los primeros 2 años de garantía está prohibido (por las marcas) manipularlos. Si aparece un problema, se envían enteros al Servicio Técnico y se reparan o sustituyen por uno nuevo, que es lo más habitual.
A partir del fin de la garantía el propietario es libre para hacer el mantenimiento que crea conveniente. Bosch por ejemplo comercializa kits de rodamientos y piñones para sus motores, que se suelen cambiar sobre los 15-20.000 Km o cuando sea necesario. El usuario puede adquirir un kit y cambiarlo él mismo, o hacerlo en un taller.
En cambio en Shimano son más celosos de su material y prefieren que el motor pase por la propia marca para cualquier reparación o tarea de mantenimiento.