Jolanda Neff acaba de hacer realidad su sueño: conseguir la medalla de oro en los juegos olímpicos de Tokio. Lo ha hecho con autoridad, y además secundada por sus compatriotas Sina Frei y Laura Indergand en un medallero 100% suizo.
Sin embargo ese sueño estuvo a punto de verse truncado al comienzo de carrera en el Sakura drop, el cortado/salto incluído en el técnico circuito olímpico y que ayer ya fue protagonista en la caída de Mathieu Van der Poel, favorito a las medallas en hombres y que en esta caída perdió sus opciones.
Lo que fue la cruz del holandés, en un error de planificación por el cual desconocía que no iba a estar una rampa que sí estaba en entrenamientos, tal como te contamos aquí, en el caso de Jolanda Neff, fue la lucha por la trazada con Ferrand-Prevot la que le hizo abordar el cortado de manera poco ortodoxa, y protagonizar una rectificación impresionante cuando cualquiera apostaría por que iba a dar con sus huesos en el suelo.
Es sabido que Jolanda Neff es la corredora más técnica del circuito, y a su vez la que es capaz de adaptarse mejor a cualquier circunstancia cambiante. Las nuevas condiciones a las que se tuvieron que enfrentar hoy las mujeres en Tokio, con un terreno resbaladizo cuando hasta ayer estaba seco y polvoriento, han sido aprovechadas por una corredora que fue capaz de abrir hueco y dominar una carrera a base de bajadas más rápidas, o subidas pedaleando sobre la bici cuando otras se desmontaban por la poca adherencia.
Jolanda Neff entrena regularmente la técnica con el asesoramiento del español Oscar Sáiz, y esa dedicación y su habilidad bien pueden haber sido recompensadas hoy por el logro más buscado por cualquier deportista, el oro olímpico.