Limpiando la bolsa de hidratación: con kit o sin kit

Dejas de montar unas semanas o meses y cuando vuelves a coger la mochila de hidratación compruebas con horror que no la habías limpiado la última vez…

Limpiando la bolsa de hidratación: con kit o sin kit
Limpiando la bolsa de hidratación: con kit o sin kit

Esto es algo habitual y más aún si en lugar de agua utilizamos bebidas energéticas o isotónicas. Donde más suele costar sacar la suciedad es en el tubo y en la embocadura de la bolsa, y por higiene es necesario tenerlas en buen estado.

El primer consejo es: vacíalo siempre y deja el depósito abierto (si es posible extrayendo la boquilla) para que el aire pueda recorrer el interior y lo seque. Sabemos hacer esto todos los días es complicado, a veces se nos olvida, otras nos da pereza…

Así que tarde o temprano toca limpiarlo. La marca Camelbak dispone del kit de limpieza que cuesta unos 20€ con cepillos especiales y todo lo necesario, para hacer una limpieza completa de la bolsa de agua.

Limpiando la bolsa de hidratación: con kit o sin kit

Si no lo tienes, básicamente lo que tienes que hacer es llenarlo con agua caliente con dos cucharadas de lejía, dejando que se llene el tubo también. Déjalo reposar media hora y luego aclara a conciencia.

Para “raspar" la suciedad adherida al interior del tubo, y si no tienes el cepillo específico, puedes usar un cable de freno al que previamente debes haber atado un trocito de trapo en el extremo. Introduce la punta opuesta por el tubo y deslízalo por el interior para arrastrar las adherencias.

Si te molesta la mochila..., haz algo al respecto

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