Las medidas de nuestra bici hacen referencia a las distancias que hay entre los puntos de contacto de la bici, es decir, los pedales, el sillín y los puños. El objetivo de registrar estas medidas es que nos permite duplicar nuestra posición sobre otra bici, especialmente cuando hemos conseguido una posición en la que nos encontramos muy cómodos.
Es muy frecuente encontrarnos con bikers que iban muy bien en una bici y cuando han cambiado les cuesta encontrar de nuevo la posición correcta, precisamente, porque no se habían tomado la molestia de anotar las medidas con las que se encontraban muy a gusto sobre su bici antigua. En relación con esto, es bueno aclarar que cuando se cambia de bici, aunque sea de la misma talla, es necesario hacer un ajuste fino de la posición que incluye la colocación del sillín en altura y retroceso así como el ajuste del manillar. Las bicis, no salen de las tiendas listas para ser montadas durante horas, es necesario adaptarlas al ciclista. Veamos qué medidas debemos tener en cuenta para medir nuestra bici:
1- Altura del sillín.
Es la medida más importante. Para medirla, tomaremos 2 puntos de referencia. El primero es el centro del sillín. Para coger la referencia, mediremos la longitud del sillín y localizaremos el centro del mismo. El segundo punto es el eje del pedalier. La medida correspondiente con la altura del sillín será la distancia entre el punto central del sillín y el centro del eje del pedalier. En este punto, es importante anotar la longitud de la biela que estemos usando, puesto que si aumentamos el tamaño de la misma habrá que bajar el sillín para conseguir la misma distancia hasta el pedal.
2- Retroceso del sillín.
Se trata de saber cómo de adelantado o retrasado está el sillín respecto al eje del pedalier, ya que esta medida influye en la mecánica de la pedalada y el reparto de pesos. Los dos puntos de referencia son: el eje del pedalier y la punta del sillín. Para medirla, colocaremos la rueda trasera contra una pared de forma que la bici quede en ángulo recto con la misma. Mediremos la distancia horizontal que hay entre la pared y el eje del pedalier. A continuación, mediremos la distancia horizontal entre la pared y la punta del sillín. La diferencia de ambas medidas será el retroceso del sillín. Un retroceso de -5 cm significa que la punta del sillín está 5 cm por detrás del eje del pedalier.
3- Ángulo del sillín.
No está de más comprobar el ángulo que tiene el sillín respecto a la horizontal. Si no disponemos de un nivel digital, existen aplicaciones móviles que pueden hacer esta medición. Para medir correctamente, debemos poner un objeto plano (una tabla) encima del sillín y a continuación mediremos la inclinación de la misma.
4- Alcance del puño.
Esta medición va a determinar como van nuestros brazos de estirados así como cuanto nos agachamos cuando llevamos las manos al manillar. Para medir, colocaremos el metro en la punta del sillín y lo llevaremos en diagonal hasta el centro del puño. Esta medición también se puede hacer hasta el centro del manillar, pero es más precisa si medimos hasta el puño, ya que tenemos en cuenta la curvatura y la anchura del manillar.
5- Altura del puño.
Aunque sea la última no deja de ser igual de importante que las demás. Se trata de saber la altura del puño en relación al sillín. Para obtener esta medida, debemos colocar la bici nivelada y tomar dos medidas: distancia desde el suelo hasta el centro del sillín y distancia desde el suelo hasta el centro del puño. La diferencia entre ellas será la altura del puño. Una altura del puño de -3 cm significa que el puño está 3 cm por debajo del sillín.
Texto: Yago Alcalde. www.ciclismoyrendimiento.com