Hay una serie de trucos o detalles que nos pueden ayudar a bajar más seguros y más rápidos cuando llegamos a zonas complicadas. Si nunca te has parado a pensar cómo te colocas sobre la bici cuando llegas a una trialera esto te interesa, ¡y mucho! Vamos allá:
1> Todo el peso en los pedales. Es muy importante concentrarse en tratar de mandar todo el peso a los pedales con los talones más bien bajos.
2> Manos ligeras. Al llevar casi todo el peso a los pedales tenemos que conseguir llevar las manos muy sueltas, sin peso. Si lo conseguimos, nos será mucho más sencillo maniobrar para colocar la bici donde queramos.
3> Rodillas flexionadas. Si llevamos las piernas estiradas no tendremos margen para reaccionar ante los baches. Las rodillas siempre tienen que ir con una ligera flexión.
4> Caderas atrás y espalda plana. Retrasando la posición conseguimos llevar el peso a los pedales y descargar de peso el manillar y la rueda delantera. El tronco debe ir en posición prácticamente horizontal.
5> Codos fuera. Los codos siempre deben ir hacia fuera, nunca metidos hacia el cuerpo. De esta forma, podremos hacer más fuerza sobre el manillar si es necesario.
6> Hombros bajos. Si además de retrasar la cadera y poner la espalda plana tratamos de bajar los hombros la posición
será impecable.
7> Cabeza alta y mirada lejos. Debemos tratar llevar la mirada un poco más allá del siguiente bache y mantener la cabeza alta. Así conseguimos mantener el peso retrasado y reducimos las posibilidades de salir por encima del manillar.
8> Baja el centro de gravedad. Tija telescópica para bajar el sillín y facilitar el descenso.