Las curvas planas son las más complicadas de realizar, porque no tienes apoyo para las ruedas y todo depende de una buena técnica de ejecución.
1 Elige bien la trazada
Para describir un arco lo más abierto posible.
2 No caigas en el error de echarte para atrás
Centra el peso, que la rueda delantera “muerda” el terreno. Flexiona codos. Suelta el freno delantero.
3 Baja el pie del exterior y presiona
Carga peso en él. Inclina la bici hacia el interior de la curva. Esto aumentará el agarre de los neumáticos.
4 Mantén la cabeza perpendicular al suelo
Y la mirada al punto del final del camino donde quieres dirigir la bici.
A medida que vayas practicando y asimilando la técnica podrás hacer las curvas con más velocidad y control.