Con el nombre de K-Force y de Afterburner, FSA presenta sus dos flamante nuevos modelos de freno de disco, terreno en el que se adentran por vez primera. Con un peso anunciado de 300 g utilizan materiales como magnesio, fibra de carbono y tornillería de titanio, y precios previstos alrededor de los 250-300 €. Se ha hecho énfasis en la ajustabilidad sin necesidad de herramientas, e incorporan anclaje flip-flop y un diseño muy compacto.
Se presentarán a la prensa y público en Eurobike e Interbike.