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Ingredientes: ¿Cómo se hace? Pon la leche en un cazo al fuego bajo con la rodaja de raíz de cúrcuma muy picada o con la cucharada de cúrcuma en polvo, añade la pimienta negra, la canela en rama y la miel. Remueve para que se disuelva bien y retira del fuego antes de que llegue a hervir, debe tener un color amarillo-dorado que le da el nombre ‘golden milk’. Un consejo: Utiliza raíz de cúrcuma, canela y pimienta negra ecológicas o de cultivo orgánico, ya que las raíces y especias son concentrados de sustancias, tanto ‘buenas’ como ‘malas’, y al hervirlas es mejor evitar los conservantes, pesticidas y otras sustancias tóxicas que se utilizan en los cultivos y conservación de alimentos no orgánicos. 20-40 minutos, háztelo justo al llegar y vete tomándola poco a poco. ¿Cuándo tomarlo? Se puede tomar a cualquier hora. Es perfecta para sustituir al té o café de por la mañana en ayunas o para sustituir a la leche con cacao por la noche antes de ir a dormir. En cuanto notes los primeros síntomas de infección, hazte un vaso caliente para empezar a notar sus efectos y ayudar a tus defensas a combatir virus y bacterias.
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La leche dorada debe su color a la cúrcuma, una raíz de color anaranjado. Es una bebida tradicional de la medicina ayurvédica oriental que vale para casi todo, porque es digestiva, antiinflamatoria, antiséptica y antioxidante. Se utiliza tradicionalmente para ayudar a digerir las comida pesadas, para aliviar el dolor e inflamación en la artritis, para prevenir tumores y para aliviar los síntomas de la gripe y resfriados, congestión nasal, dolor de cabeza y garganta. El flavonoide curcumina de esta raíz naranja, no es de fácil absorción, es conveniente tomarlo disuelto en una grasa como la de la leche y activarlo con el calor y la pimienta negra que amplifica su absorción un 2.000%.