En la comunicación anunciando la llegada de sus nuevas ruedas al mercado, unas ruedas que ya han sido testadas en competición con equipos como Primaflor Mondraker o Klimatiza Toteemi Cabberty, la marca nos hace una introducción explicando que, utilizando la tecnología clásica de compactación de carbono, no se puede construir una llanta de carbono fiable para el XC moderno y con 30 mm internos de menos de 360 g.
Por eso la marca anuncia que ha desarrollado la tecnología SPR. Esta tecnología permite crear llantas con paredes más delgadas, reduciendo significativamente el peso sin comprometer la resistencia. Utiliza la última generación de carbono, la fibra Toray T1000 con resina de Grafeno, la más compacta, y se refuerza la posición correcta alrededor de los agujeros de los radios. Esta tecnología permite trabajar con paredes más delgadas, ahorrando mucho peso sin perder resistencia. El proceso de producción de la llanta GPX consigue un peso de 330 g, y es más del doble de complejo que el de una llanta de carbono moldeada estándar.
Esta llanta es al protagonista de dos juegos alternativos de ruedas, con bujes Nexo o Nitro, con un peso declarado del pack de 1300 g en ambos casos. En cuanto a los precios, el set de GPX Nexo sale a la venta por 1.790 €, y el de GPX Nitro, 1.580 €.
Puedes consultar las distintas versiones de núcleo, colores y estándares en https://progresscycles.com/